La Cámara de Valladolid, en su defensa de los intereses generales del comercio, la industria y los servicios, y en base a su apuesta por el tejido empresarial vallisoletano, considera que la excesiva concentración de la financiación de pymes y micropymes podría dar lugar a problemas de insuficiente oferta.
Tras un periodo postpandemia de recuperación de la actividad, desde la Cámara de Valladolid se considera muy conveniente una diversidad de fuentes de financiación para que ésta se pueda distribuir entre la mayor cantidad posible de empresas, de tal manera que se consolide la recuperación tras el durísimo periodo vivido por diferentes sectores productivos.
Las últimas concentraciones de la financiación a empresas ya sitúan a España como uno de los países de la Unión Europea con menor oferta financiera, lo que supone una acumulación de riesgo y una merma en las fuentes de financiación para pymes y autónomos, que en su conjunto representan más del 90 por ciento del total de las empresas.
Por todo ello, la Cámara de Valladolid, permanecerá atenta con el objetivo último de mantener la democratización de la financiación, si bien el resultado final corresponde a los órganos de decisión involucrados, mostrando desde la institución cameral absoluto respeto a la decisión que estos adopten.